¿Vale la pena cambiar de Windows 7 por el Windows 8?

El lanzamiento de un nuevo sistema operativo, especialmente cuando es producido por la Microsoft, siempre trae una gran cantidad de controversia. Después de todo, la sensación es que es que el entorno en el que se utiliza es obsoleta y no recibirá una noticia realmente interesante. Hoy en día, cualquier persona que utilice Windows pasa por uno de esos momentos. Con el lanzamiento oficial del Windows 8 Consumer Preview se inicia la cuenta regresiva para el final de W7.
Pero al final vale la pena aceptar porque el cambio es inevitable y abrazar a cada novedad o una decisión. Pase tiempo con una versión de prueba de Windows 8 y en este post, presentare las razones por las que se deben considerar antes de mudarse a la nueva plataforma.

Cambio de paradigma
Por mas que la idea sea extraña, alguien acostumbrado a Windows 7, y se viera obligado a utilizar la versión 95 no tendría muchos problemas de adaptación al sistema operativo. Incluso si algunas opciones funcionaran de forma diferente y algunas características no existieran, el hecho de que ambos productos compartan la misma estructura básica no se hace muy complicado el proceso de adaptación.

La misma situación no ocurriría cuando se compara cualquier producto de Microsoft con Windows 8. La interfaz Metro representa un cambio radical de dirección, dejando de lado muchos elementos consagrados, como la barra de título de tamaño configurable ventanas e incluso en el botón Inicio tradicional .

La dificultad inicial para el software es inevitable, incluso para aquellos que dominan las funciones complejas ya lanzadas por la empresa. No hay necesidad de cerrar cualquier aplicación y depender de los bordes de la pantalla para alternar entre las tareas, requiere un poco de adaptación, especialmente aquellos que estaban acostumbrados a usar el mouse y el teclado.

Un sistema dentro de la otra
Algo que está claro en el Windows 8 es que Microsoft era consciente de que el nuevo producto podría provocar una descarga entre los consumidores. Por eso empresa garantizo que todo Windows 7estaba dentro del SO, con derecho a algunas mejoras en la interfaz y en algunas funcionalidades.

Esta situación no es exactamente nueva, ya que la empresa hace exactamente la misma cosa desde que el primer sucesor del sistema operativo llegará al mercado. A medida que cada nuevo software está construido sobre la base de lo que se ha hecho antes, la compatibilidad con versiones anteriores de dispositivos y aplicaciones está garantizada - una situación que ayuda a muchos consumidores a decidirse por una actualización.

El problema se hace evidente con la versión previa de los consumidores es que hay mucha disparidad entre el nuevo método de uso de Windows. La interfaz es muy diferente al anterior, y hay algo de molestia cuando  existe un cambio.

Especialmente cuando se utiliza el sistema operativo en una PC convencional, cambiar entre el visual reformado y el antiguo desktop no es solo una tarea extraña si no lo peor es que necesario cambiarlo. El hecho de que los viejos elementos no se ajustan a la forma más adecuada en el entorno mejorado aún más fuerte sólo deja la impresión de que el viejo sistema operativo simplemente estaba "incrustado" en el nuevo orden para evitar reclamaciones.

Foco en las tablets
El principal problema con Windows 8, especialmente para aquellos que usan una computadora convencional, es su enfoque en los sistemas basados ​​en el tacto. Mientras que la plataforma se adapta fácilmente a una tablet, el producto no llega a su máximo potencial cuando se necesita utilizar el mouse y el teclado, incluso con los ajustes realizados por Microsoft.

Este es el principal obstáculo que la empresa tendrá que superar para no tener un nuevo Windows Vista en  manos. Usar la interfaz Metro a través de medios convencionales de interacción no es exactamente una dificultad, pero está claro que esto no es la forma ideal para navegar.

Aunque la tendencia es que la mayoría de los dispositivos del futuro se tornen compatible con la tecnología de pantalla táctil, que está todavía lejos de convertirse en una regla. Esto hace que la empresa corran un grave riesgo, especialmente si su incursión en el mundo de las tabletas no es lo suficientemente fuerte como para afectar el reinado de Apple y su iPhone.

Un cambio es indispensable?
Debido a las razones expuestas, es fácil concluir que, aunque Windows 8 es un sistema competente, una actualización está lejos de ser necesario. Especialmente para aquellos que usan el escritorio, el sistema operativo sufre de cierta "esquizofrenia", causada por la separación del interfaz Metro y la funcion Desktop 

A menos que Microsoft realice alteraciones substanciales en la forma como esos cambios constantes entre en ambientes y realizada, difícilmente el producto conquistara en las computadoras tradicionales el mismo éxito de Windows 7. En las tabletas y dispositivos de mano, la historia parece que va a ser diferente - pero no podemos subestimar el desafío que Apple va a representar en el segmento.

La mejor manera de decidir si el cambio vale la pena o no instalar la version Consumer Preview, de preferencia en   dual boot, y la testar por sí mismo la novedad. O esperar a la versión final y ver si Microsoft no preparo una sorpresa y pueda hacer el trabajo más fácil para aquellas peronas que todavía depende del mouse y el teclado.